Grande MA!!!

El universo completo se ha confabulado para que me convierta en la bruja Amelia. Mis dos hijos me odian porque tomé la triste decisión de castigarlos. Yo puedo entender que entre ellos existan roces propios de la convivencia diaria, pero los insultos de grueso calibre proferidos, sólo podían ser repelidos con una decisión extrema que me llevó a imponerles reclusión nocturna en celda solitaria y privación total de información por medios escritos, televisivos o computacionales.

He intentado por todos los medios explicarle a Maximiliano que su hermana es mujer y que por lo mismo, no puede decirle GORDA; Primero, porque la acompleja y eso ha traído como consecuencia que sólo tome coca ligth y segundo porque ya no lo es, de hecho ahora está en el peso ideal. Nada de lo que le he dicho a servido porque apenas abrí la puerta de mi dulce hogar me encontré con mi principito gritándole a la loca de mi hija "Obesa MORFIDA". Y como mi Fefy es bien Yegua para sus cosas le contestaba con tono histérico-Marengo, que ella no era Morfida, que era una princesa "faca", osea flaca.

A continuación de los gritos de bienvenida, vino la violencia física y sin que pudiese evitarlo mi pequeño Chuky se subió a una de las sillas del comedor y como si se tratase de una liana se colgó del pelo de su hermano cual Jane de la selva. Me costó tanto despegar sus manitos llenas de mantecol de la cabeza de mi pobre niño que por un segundo pensé que Maxito quedaría con un pelón similar al que se hizo acreedor el pobre perro que casi no sobrevivió a las torturas de mi niña en el verano.

He meditado bastante y considerando mi indiscutible inmadurez, he concluído que al parecer no estoy preparada para cumplir exitosamente mi rol de madre, de hecho me pregunto a diario, cómo mi mamá no se ha vuelto loca si me crió a mi y ahora sigue haciéndolo con mis hijos. Por todo lo anterior, más que merecidos los muchísimos regalos que le hice para su día y aunque casi me dio un colapso nervioso económico cuando ví la cuenta del restaurant donde celebramos el domingo el día de la madre, nada podría compensar la labor que realiza a diario mi abnegada progenitora, quien obnubilada por el incontenible amor que siente por sus nietos comete la locura máxima de enchufarle al pobre pololo a sus dos angelitos. Yo no entiendo, pero ese mártir que sin duda alguna debe ser canonizado, nunca le dice nada y por mas que la invita a pasar fines de semana de completo amor, ella lo posterga argumentando que es una especie de "combo" y que si realmente la quiere debe aceptar a su extraordinaria familia. De sólo imaginarme al pobre Coty jugando fútbol apenas con Maximiliano me convenzo más de que deberé postularlo urgentemente para el premio Nobel de la paciencia

De verdad, ignoro hasta dónde llegará su amor incondicional y siento que debo comenzar a preocuparme por la falta de objetividad que la tiene ciega; Ahora, no conforme con las buenas notas en Inglés de mi chiquiturri, me dijo que la profesora del ramo era tan mala que le soplaba las respuestas a los niños en las pruebas para que no la echaran y que yo debía hacerme cargo de esta situación porque maxyto no sabía ni decir "Hello"; Después me aseguró que si no mandaba a la fefy pronto al jardín infantil un día me encontraría con la casa destruida y que si no le pagaba $1.000 al Maxy por cada nota siete que se sacara, el "niño" nunca mas traería buenas calificaciones.

Con este alentador panorama de locura extrema en mi familia queda claro porqué prefiero ser trabajólica???