domingo, septiembre 24, 2006

Abogado chanta excarceladora, NO busca Trabajo

Hace algún tiempo un fiscal me dijo que si dejaba de lado mi postura de abogado excarceladora, probablemente lo haría mejor. Siendo sincera, me sentí algo ofendida y pensé que en realidad lo que había querido decir es que mi trabajo le parecía chanta lo que en la práctica es entendible porque son varios los que no hacen bien la pega.
Habiendo tomado aire y resignándome al desprecio fiscalístico, decidí autodenominarme “abogado chanta excarceladora” y debo decir que me siento bien cómoda con este papel porque de entrada con tal nombre nadie espera mucho de uno entonces todo lo que se haga medianamente bien es algo así como una gracia, quizá un bonus track.
Nunca he entendido porqué algunos abogados que trabajan en el sector público tienen un mal concepto de los que cobramos por nuestros servicios y en algún minuto me he detenido a pensar en el mal chiste que compara a los abogados con las prostitutas y que dice que ninguno de ellos se mueve si no se les paga. Entonces yo me pregunto ¿debemos ejercer gratuitamente so pena de ser expulsados del gremio por pillos?, ¿ Somos unos sinverguenzas?.
Recuerdo que cuando hice la práctica mi jefa se dedicaba a sacarles la cresta a los abogados particulares y finalmente como soy una legítima contradictora me propuse como objetivo pertenecer a tan despreciable grupo de profesionales, renuncié al poder judicial y juré por todas mis estrellitas que jamás concursaría o me opondría a ningún cargo público, antes prefiero servir mesas (pero en el caribe) o volver a Venezuela para apoyar a Chávez.
Digamos que en realidad me he tomado esto con humor y en mi calidad de abogado chanta excarceladora debo señalar que los abominables seres de mi bando son:
- Libres como los pájaros, no cumplen horarios y toman sus propias decisiones sin temor a ser mal calificados.
- Autosuficientes, capaces de generar sus ingresos en forma independiente.
- Eligieron trabajar en lo que les apasiona.
- Lograron cautivar a sus clientes por sus aptitudes y estilo.
- Fieles a sus convicciones y por lo mismo vibran enteritos cuando se gana una batalla por pequeñita que esta sea.
- Leales con sus clientes.
- Ambiciosos por excelencia.
- A veces inmensamente ricos y otras tan pobres como la pequeña vendedora de fósforos.
- De puro corazón cuando la máquina del estado pretende pasar su aplanadora.
- Sensibles ante la miseria.
- Zorros, astutos.
- Increíblemente buenos para comer rico.
- Privilegiados porque han logrado conocer hasta donde puede llegar la maldad en los hombres.
Somos bien pencas no???

4 Comments:

Anonymous Anónimo said...

fui yo?

1:01 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Estoy tras tu pista usuario anonimo, tu ultimo comentario me da que pensar

11:53 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

somos libres, libres, muy libres, y a veces muy ricos, y otras pobres, pero honrados, ademas, y hablo por el circulo cerrado sanos, muy sanos
jairo

7:54 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

En el estado actual de la carrera, con millones de abogados dando vueltas, lo de "pobres como la niña de la caja de fóforos" está siendo la regla.

12:11 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home

adopt your own virtual pet!
ecoestadistica.com