Tratado de libre comercio

Por culpa del TLC firmado con los chinos, casi muero por asfixia.

Ayer, Rodrigo emitió un S.O.S por cuanto se llevaría a cabo la audiencia de formalización del casito de las joyas del Parque Arauco. Su idea siempre es la misma, o sea hacer número, unir fuerzas y que alguno de nosotros, menos él, se haga cargo de la prensa. Así las cosas y prácticamente sin que nadie se lo pidiese, Juan Jaime salió de la sala dando entrevistas a quien se lo pidiera porque le encanta ser estrella y dárselas de abogado mediático, onda Morga-polilla. Lamentablemente para él, sus encantos y sus explicaciones sobre lo justo y lo injusto “no tuvieron ningún brillo”, como dicen mis clientes y el único que figuró tanto en la TV como en los diarios fue Rodrilop.

Mientras caminábamos por la pasarela JuanJa me advirtió que no pensaba dedicar su vida a sacar delincuentes de la cárcel, que él estaba para las grandes ligas y que ahora con el TLC su vida cambiaría por completo porque desde este lunes comenzaba sus clases de chino mandarín y que su plan era figurar en la pagina web de la embajada de chile en china y viceversa para que todos los chinitos lo contrataran y él se convirtiera en algo así como un millonario instantaneo porque su plan inicial de casarse con una mujer forrada en plata había fracasado, por el momento.

Me explicó latamente todos las ventajas de relacionarse con los chinos y yo la muy ilusa lo escuché pacientemente haciéndole presente que el chino mandarin me parecía muy difícil a lo que me contestó que su papá también pensaba que era muy difícil que él se recibiera de algo o que dejara de tomar y finalmente ambas cosas habían ocurrido. Además con tono orgulloso me indicó que él ya sabía dos palabras en chino; Sabía decir “I CHING” y después, cuando ya estábamos en el café me indicó que además sabía decir pescado en chino, a lo que yo más que asombrada le dije: En serio?, y como se dice???: Y aquí viene la parte trágica, el muy bestia me dijo que se decía A-TUN y justo cuando dijo TUN me dio un golpe de karate en el estómago brutal que me dejó pálida, pero que de todas formas no me impidió patearlo por pelotudo.

Yo, la verdad no voy a seguir con los reclamos tendientes a denunciar los abusos físicos que soy objeto por parte de mis amigos, quienes, insisto no logran entender que soy mujer, que peso 46 kilos y que fácilmente me puedo quebrar; Lo que acá pretendo es dejar establecido lo TONTA soy porque hay que ser muy bruta para escuchar a un demente AUNQUE SEA MI AMIGO y bien estúpida para creer que con lo burro que es él puede saber una palabra en otro idioma que no sea español o COA